Una de las medidas tomadas por el Hospital San Juan de Dios de Los Andes el año pasado para disminuir los riesgos de transmisión del Covid19 entre pacientes hospitalizados, familia y trabajadores, fue restringir las visitas de familiares. Esta decisión trajo consigo la necesidad de contar con un stock permanente de útiles de higiene personal para todos los pacientes hospitalizados, razón por la cual se inició un trabajo con organizaciones de la comunidad, empresas y personas naturales que aportaron los implementos necesarios para mantener la debida higiene de las personas hospitalizadas.

Atendiendo el éxito de esta iniciativa, y en el contexto de la actual cuarentena, donde las familias tienen menos posibilidades de acercarse al establecimiento para llevar estos insumos, el HOSLA inició nuevamente la Campaña de Donación de Artículos de Aseo Personal, la que nuevamente ha contado con la importante participación de organizaciones como Clown Sonrisas Aconcagua, voluntariados Damas de Rojo, Pastoral Caritas Chile, Damas de Rosado, Damas de Blanco, personas naturales y la Agrupación de Amigos del Hospital.

Junto con agradecer a las organizaciones que se han sumado a esta campaña, la Subdirectora de Gestión del Usuario del HOSLA, Paula Cacciuttolo Aragón, invitó a las organizaciones de la comunidad que quieran sumarse a esta campaña, a comunicarse con ella a los fonos 34 2493938 – 34 2493939, o al email paula.cacciuttolo@redsalud.gov.cl, a fin de coordinar la entrega de sus donaciones.

La profesional indicó también que todas las donaciones son recepcionadas y organizadas por la Unidad de Servicio Social del establecimiento, la que hace una entrega controlada de éstos a los servicios clínicos de hospitalización, a fin de garantizar que todos los pacientes tengan los útiles de aseo personal que necesitan.

A modo de ejemplo, los pacientes requieren a diario jabón líquido, shampoo de cabello, desodorantes en spray, pasta de dental, escobilla de dientes, máquinas de afeitar, colonia y aceite emulsionado. Muchos también necesitan pañales de adultos y sabanillas, por su imposibilidad de moverse de sus camas clínicas.